Las Emociones Navideñas: tristeza, felicidad ¿qué es lo que siento?

Las emociones navideñas, son las que nos acompañan en esta época del año, cuando se festeja en todo el mundo una de las celebraciones más importantes en especial para el cristianismo.

Se celebra el nacimiento del Niño Jesús, que nació un 25 de diciembre en Belén. La navidad se ha
extendido días previos y posteriores a esta fecha, y hemos convertido el mes de diciembre en un mes
de fiestas continuas hasta comienzos del mes de enero.

La navidad no es exclusiva para los religiosos, ya que muchas personas en el mundo la celebran de
diferentes maneras.
En esta época afloran emociones a las que nos referimos como emociones
navideñas, que surgen de manera especial en estas fechas y son una mezcla de sentimientos que nos
hacen sentir felicidad, temor, nostalgia, alegría, estrés, tristeza, amor, o preocupación.

Estas emociones debemos saber reconocerlas en nosotros y en los demás. Los niños nos contagian
con su ilusión y deseo de recibir obsequios de parte de la familia o Santa Claus, y estos a su vez
pueden generar en nosotros incertidumbre o ansiedad por cumplir con las tradiciones típicas familiares
de cada país.

Poco a poco se ha perdido el verdadero significado de esta época el cual es un tiempo para la reflexión
y la paz. Navidad es tiempo para fortalecer valores como la solidaridad, la unión y el anhelo, pero se ha
convertido en una época de consumo y vanidad.

Sin embargo, en esa búsqueda de la felicidad, el regocijo o la alianza encontramos esa mezcla de
emociones alborotadas en nuestro ser, que muchas veces no sabemos manejar, ocasionando una
alteración o parálisis emocional que no nos permite disfrutar tranquilamente de estas fiestas.

¿Qué emociones experimentamos en navidad?

Entonces, en navidad surgen en nosotros varios sentimientos, de alegría y de tristeza, experimentamos
emociones navideñas:

  • Tristeza y nostalgia: por no estar al lado de sus seres queridos. Por añorar el pasado compartido
    rodeado de las personas importantes en nuestra vida.

  • Culpa: al cometer excesos, comida, bebida, gastos o bien por no haber alcanzado algún objetivo
    planteado durante el año.

  • Estrés: por tener las cosas al día, la hora, cumplir con todos los compromisos, generar los
    ingresos extras para cubrir los gastos
  • Esperanza: cuando emprendemos un proyecto profesional o personal, para alcanzar esa meta propuesta y visualizar que siempre hay tiempos buenos y que podemos superar obstáculos.
  • Felicidad: al compartir momentos, recordar lo bueno y aprender de lo no tan bueno, reconciliarse, reunirse, celebrar la vida y proponer nuevas metas.
  • Alegría: significa regocijarse, estar contento, es un deleite de la mente, de una experiencia del presente, o la seguridad de un bien que se aproxima.

En esta época donde experimentamos una mezcla de emociones, debemos darnos espacio para reflexionar, perdonar, aprender, y continuar adelante a pesar de la situación. Recordar que la vida es un sube y baja de emociones para no sentirnos mal y contagiar a todos de alegría y felicidad.

Sin embargo, debemos tener en cuenta que son los neurotransmisores de las emociones, los encargados de generar sustancias (dopamina, serotonina, oxitocina, endorfina) que nos elevan la felicidad, la alegría y el placer, y que necesitamos tener en cuenta para subir el ánimo si nos sentimos un poco triste, estresados o culpable por toda esta avalancha de actividades navideñas.

 

Nuestro cerebro produce sustancias de la felicidad

Visualicemos entonces que acciones podemos realizar para generar emociones navideñas positivas y esas sustancias actúen en nuestro cerebro efectivamente:

1. Serotonina: Regula el estado de ánimo y se relaciona con la autoestima, la autoconfianza, aumentando cuando nos sentimos importantes.

Para acrecentar su producción podemos:

·         Disfruta de la naturaleza. También puedes tener plantas en tu hogar.

·         Recordar momentos importantes y felices.

·         Tener momentos de felicidad, de risas en familia y de juego navideño.

·         Disfrutar de un intercambio de regalos o la sorpresa de recibir lo que le pedimos al niño Jesús también será una buena oportunidad.

2. Dopamina: Encargada del placer, y se relaciona con el cumplimiento de metas y deseos.

Para estimularla es recomendable:

·         Dormir de 7 a 9 horas al día y descansar lo suficiente.

·         Celebrar logros diarios.

·         Puedes comenzar a adornar la casa, tu oficina, tu negocio. Ese cambio nos produce felicidad.

·         La decoración navideña aumentará la dopamina.

3. Oxitocina: Reduce el estrés y aumenta la lívido, y se relaciona con los lazos afectivos y emocionales que establecemos.

Es aconsejable:

·         Abrazar a tus seres queridos

·         Ser generoso

·         Tener pensamientos positivos

·         Acariciar a tu mascota

Expresar gratitud hacia las personas que te rodean y hacia aquellas que siempre están a tu lado. Crea tradiciones navideñas en torno a la conexión, como puede ser abrir regalos en familia en Nochebuena, compartiendo ilusiones y risas.

4. Endorfina: Reduce el dolor, el estrés y el miedo.

Aumenta su producción cuando:

·         Reímos con tus seres queridos

·         Bailamos y cantamos

En esta época, agradece, por otro año más, por esa meta alcanzada, por ese respirar, por la salud, por escuchar, por ver una mañana radiante. Agradece por la oportunidad de rodearte de personas maravillosas, por aprender de los errores, por caer y levantarse, por todo lo bueno de la vida.

 

Una tradición que despierta emociones navideñas

En Venezuela y en otros países de Latinoamérica, es común escuchar en esta época popular canción de la orquesta Billo´s Caracas Boys. Tan sencilla y pegajosa pero que resume las emociones navideñas propias de esta época, y nos habla de como puede ser la navidad para unos y para otros:

Navidad que vuelve

tradición del año

unos van alegres

otros van llorando.

 

Recuerda, la forma en que interpretas tus emociones puede cambiar la forma como las vives. La forma en que reacciones frente a una emoción en concreto condicionará cómo ésta actúa en ti. Nunca es demasiado tarde para adquirir habilidades y herramientas que nos permitan construir una sana inteligencia emocional.

Saber gestionar nuestras emociones nos hace ser más conscientes de lo que sentimos, identificar los sentimientos, aceptarlos y moderar nuestra respuesta.

Disfrutemos la navidad plenamente, del afecto y la alegría que manifiestan los niños, de la alegría que encontramos en las calles, de la música, de las luces de las ciudades. Contágiate de lo bueno, disfruta y sobre todo, se feliz.

La familia ACCA te desea una feliz Navidad y un Año Nuevo lleno de ilusión, paz, alegría y felicidad, cargado de muchas emociones positivas. Te esperamos en el 2022 con los brazos abiertos y dispuestos a brindarte las herramientas y la guía para que alcances todas las metas personales y profesionales que tanto anhelas.

 

FELIZ NAVIDAD!

 

-.Vianey Flores

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